lunes, 15 de agosto de 2011

-      - 'Fue un dia difícil'
Le tuvo que contestar al cantinero después de su tercer trago.
Una excusa? No, no era una excusa, el solamente quería ahogar sus penas, no llegaría a ningún lado pero era la única salida. Podría seguir intentando. Intentando hacer qué? Qué se podría hacer? Simplemente descargar sus palabras en una servilleta, como lo estaba haciendo, en una letra casi ilegible, unas palabras que quizás ella nunca iba a llegar a leer, pero que valían la pena escribir. Para qué? Simplemente un poco de alivio al alma, supuso.
Lo nuestro era mágico ¿sabes? Me encantaba vivir en nuestro propio país de las maravillas, me encantaba leer tus cartas, me encantaba saber que había alguien en el mundo a quien importarle. Me gustaba simplemente saber que existía alguien en el mundo para mí, me gustaba saber que no estaba solo.
Te extraño ¿sabes? Si, puede que sí, pero lamentablemente no voy a tropezar dos veces con la misma piedra, al saber que llegaré demasiado tarde ante tu corazón, simplemente prefiero apartarme y que alguien mas lo tome, alguien que vos eligas y que sepa valorarte, algún corazón que sepa querer, algún corazón que ya lo sepa de antes, no uno al que le tuviste que enseñar a hacerlo.
Es raro ¿sabes? Es raro pensar en todo lo que “vivimos”. Es raro pensar en las cosas que nos decíamos, es raro pensar que me imaginaba en tu cama acostado a tu lado, para luego pensar que en ese lugar está él, haciendo de las suyas cosas que sinceramente no son de mi incumbencia. Es raro el hecho de que ya no tenga  alguien con quien soñar, alguien con quien llorar, alguien a quien presentarle a mi abuela muerta.
Es triste ¿sabes? Es triste que todas las promesas se hayan ido con el viento, es triste que nunca te hayas podido dar cuenta de que yo no cometí el ciento por ciento de los errores, es triste que siempre yo haya tenido la culpa, que no hayas podido ver todo desde otro punto de vista. Es triste que no le hayas hecho caso a los que te decían qué hacer, y que te hayas equivocado tropezándote con alguien como yo.
Me sorprende ¿sabes? Me sorprende darme cuenta que lo que solía ser un cuento de hadas junto a la chimenea resulto ser una historia de terror de campamento.
Duele ¿sabes? Duele ser como yo. Duele pensar y dudar de todo lo que me decías, duele caer en la realidad y ver que no soy todo lo que me decías que era. Duele no ser nada, duele ser nadie. Duele no tener a ese “alguien” que sé que pase lo que pase me va a querer, duele pensar que todo se acabó. Duele tener que empezar desde cero. Duele tener que volver a relucir mi corazón, ya como está, lleno de cicatrices.
Duele…
Y con esta última canción que suena en la rocola, me despido, ya me están echando y esto no es nada mas que un último respiro de lo que es, nada de lo que siento. No se podría explicar por escrito, no se podrá explicar nunca.
Porque al final, el que salió perdiendo fui yo, me alegró que puedas haber encontrado a ese alguien que te resguarde. Pero, debo admitir, que lo que mas dolió fue ver el hecho de que tu pluma ahora escribe para otro, tu pluma ahora no escribe mas que despedidas para mí, y simplemente respondo con esto: sé feliz, buena suerte y hasta luego

Aquella rosa muerta en la calle espera, mensaje tras mensaje, preparándose a volar, porque habías sido tu mi compañera,
Porque ya no eres nada, y ahora todo esta de mas.
Si no te supe amar, no fue por ti, No creo en el amor y no es por mí, Si no te supe ver y te perdí Si cada día que me das te hace sufrir.
No, no
Volver a verte otra vez, con los ojitos empapados en ayer, con la dulzura de un amor que nadie ve, con la promesa de aquel ultimo café, con un montón de sueños rotos.
Deje el orgullo atrás por un instante, me prepare a estar solo una vez mas.
Si no te supe amar, no fue por ti,
No creo en el amor y no es por mi,